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Papa

La envidia: instrumento del diablo para destruir

Misa 09 de mayo en casa Santa Marta

En la Misa celebrada en la casa Santa Marta de este 9 de mayo, el Papa Francisco explicó que el instrumento que el diablo usa para destruir la proclamación del Evangelio es la envidia.

En su homilía, el Santo Padre comenzó recordando unas frases del Salmo 98, recitadas en la Liturgia del día, que afirma: "canten al Señor una nueva canción porque Él ha hecho maravillas. Su mano derecha y su brazo sagrado le dieron la victoria. El Señor ha dado a conocer su salvación, a los ojos del pueblo ha revelado su justicia".

"¡Esto es verdad, el Señor ha hecho maravillas! Pero cuánta fatiga, cuánta fatiga para las comunidades cristianas llevar adelante estas maravillas del Señor", reconoció el Papa.

En este sentido, el Papa Francisco destacó la alegría de todas las personas de la ciudad cuando se reunieron para escuchar la Palabra del Señor predicada por Pablo y los apóstoles porque ellos "predicaban con fuerza, y el Espíritu les ayudaba" pero al ver esa multitud, los judíos "se llenaron de celos, y con palabras injuriosas contrastaban las afirmaciones de Pablo".

En esta línea, el Pontífice reconoció que "por un lado está el Señor, está el Espíritu Santo, que hace crecer a la Iglesia, y siempre crece más: esto es verdad. Pero por otro lado está el espíritu maligno que trata de destruir la Iglesia".

Instrumento del diablo

Por ello, el Santo Padre cuestionó: "¿cuál es el instrumento del diablo para destruir la proclamación del Evangelio?" y respondió: "¡La envidia!" al citar el Libro de la Sabiduría que, lo dice claramente: por la envidia del diablo el pecado ha entrado en el mundo".

"Envidia, celos... Siempre este sentimiento amargo, amargo. Esta gente veía cómo se predicaba el Evangelio y se enfadaba, se roían el hígado de rabia. Y esta rabia los llevaba adelante: es la rabia del diablo, es la rabia que destruye, la rabia de ese: "¡crucifica, crucifica!", de esa tortura de Jesús. Quiere destruir. Siempre. Siempre".

De este modo, el Papa Francisco advirtió que "viendo esa lucha también, es válido para nosotros, la Iglesia va hacia adelante entre las consolaciones de Dios y las persecuciones del mundo. Una Iglesia que no tiene dificultades le falta algo, algo falta, y si el diablo está tranquilo, las cosas no van bien".

"Siempre la dificultad, la tentación, la lucha, los celos que destruyen. El Espíritu Santo hace la armonía de la Iglesia y el espíritu maligno destruye. Hasta hoy. Hasta hoy. Siempre esta lucha". El instrumento de estos celos, de esta envidia son los poderes temporales", afirmó el Papa quien alertó sobre el poder temporal que "puede ser bueno, las personas pueden ser buenas pero el poder como tal siempre es peligroso".

Por ello, el Pontífice señaló que "el poder del mundo contra el poder de Dios mueve todo esto y siempre detrás de éste, ese poder, está el dinero".

Fuente: Aciprensa