Sétimo día de la Novena en honor a Nuestra Señora de los Ángeles
·
Obispo
denuncia violencia en Puntarenas.
David
Mora, periodista
En
el sétimo día de la Novena en honor a Nuestra Señora de los Ángeles, la Diócesis
de Puntarenas peregrinó hasta los pies de "La Negrita" este martes 29 de julio,
Fiesta de los Santos Marta, María y Lázaro.
A
eso de las 10 de la mañana, entre cantos y misterios del Santo Rosario, 25
sacerdotes y fieles porteños; encabezados por su obispo, Monseñor Oscar
Fernández, caminaron desde el Museo Municipal de Cartago hasta la Basílica de
los Ángeles.
Pasadas
las 11 de la mañana, comenzó la celebración eucarística, en la que el prelado
denunció que Puntarenas vive en luto a causa de la violencia, así como lo vivió
Marta por la muerte de su hermano Lázaro.
"Nuestros
pueblos están llenos de muerte, en Puntarenas, en Limón, en San José, en muchos
cantones y pueblos, personas expertas en dar muerte a otras personas. Hay luto,
lágrimas, asesinatos, accidentes, mujeres asesinadas...Como en Betania, en Costa
Rica y en el mundo entero hay muerte violenta, cruel, hay luto en muchos
hogares y muchos rostros...Jesús quiere entrar a nuestros pueblos, a través de la
Iglesia...Por la Iglesia, Cristo visita nuestros pueblos, heridos de muerte",
manifestó el obispo puntarenense.
Monseñor
Fernández expresó que "Jesús se hace presente en Betania, como se hace presente
en nuestros pueblos, violentos y agresivos, se encuentra con las madres y
hermanos sufrientes, y también quiere que esos grupos asesinos le abran la
puerta". También exhortó a imitar a Santa Marta y salir al encuentro de Jesús,
el prelado invitó a interiorizar en la pregunta que hizo Jesucristo a Marta
sobre la resurrección: ¿Crees esto?
"Vamos
camino a la tienda de la Patria celestial. Cristo ha abierto las puertas de la
mansión del Padre, la tienda definitiva, donde el Padre nos espera a todos",
finalizó el obispo en su homilía.
Monseñor
Oscar Fernández cumplió 75 años el pasado 22 de diciembre de 2024, por lo que
presentó su renuncia como obispo al Papa Francisco. Le corresponderá a León XIV
nombrar a su sucesor.